Cuando hacemos un Plan Estratégico de Comunicación y en él incluimos una fan page de Facebook entre otras acciones, creemos saber como se comportarán los fans ante las actualizaciones que hayamos proyectado, pero cada día pueden sorprendernos sus múltiples reacciones.

Si leemos los mil post que corren por internet hablando del tema,  nos contarán cómo ganar fans, cómo conseguir más interacciones, cómo fidelizarlos, cómo interactuar, cómo…

Pero no me canso de repetir que cada marca y cada producto es un mundo, cada comunidad otro y lo más importante,  cada día las personas se comportan de diferente modo dependiendo como les haya ido la jornada, su estado de ánimo o la comprensión que se haga del texto publicado.

Lo que para unos puede parecer obvio,  para otros puede resultar complicado o simplemente ser mal interpretado.

Hay veces que cuando publicamos algo que pensábamos iba a ser realmente impactante,  recibimos 3 «me gusta» y en cambio algo que nos parece más vanal nos sorprende con cientos de interacciones y comentarios de los fans.

Quizás se animen unos a otros, no olvidemos que cuando un fan interactúa vuelve a reactivar la publicación y por tanto la marca vuelve a estar visible para que quien no lo haya visto o no le haya prestado atención en un primer momento,  decida entrar en acción.

Hoy tenemos un caso realmente curioso relatado por un Community Manager.

Una marca llegaba a la cifra redonda de 5.000 fans y cómo es lógico.  se tenía preparada dentro de la estrategia de comunicación una publicación  no solo para comunicarlo y agradecer a todos los fans su apoyo, si no también se trataba de premiar a los X primeros que respondieran a una sencilla pregunta publicada en el muro.

Curiosamente se recibieron menos respuestas que premios se habían anunciado y lo que más les sorprendió es que tres fans  decidieron dejar de serlo.

Cierto es que 3 fans sobre 5.000 es un 0,06% del total, pero bajo mi punto de vista y tras ver la actualización,  no tiene explicación lógica alguna.

La marca sobrepasó la cifra de 5.000 porque lógicamente creció con nuevos fans atraídos por la promoción, pero no deja de asombrar la falta de reacción masiva ante un regalo (no se especificaba en que consistía el mismo) que en definitiva ofrecía la marca.

Por tanto tengamos claro que:

Los decálogos solo sirven como orientación pero nunca los podemos seguir a pies juntillas

No demos por sentado que una idea será muy bien acogida y será un éxito, porque podemos equivocarnos

Y sobre todo no olvidemos que estamos tratando con personas heterogéneas que,  aunque forman parte de una misma comunidad, se comportan y reaccionan de forma difícilmente  predecible.