La vida va avanzando y solo hay dos cosas que te hacen ser consciente de ello. El crecimiento de tus hijos y los recuerdos que vas archivando en tu mente.

La primera vez que recuerdo haberme encontrado con la marca Milford, fue a finales de los 70 (un familiar fue su representante comercial). Lógicamente, a partir de ese momento en casa siempre había infusiones de esta marca, pero hasta entonces siempre había pensado que los tes y las manzanillas eran para los enfermos.

A principios de los 90, descubrí gracias a un amigo medico los efectos antioxidantes del te, especialmente el te verde y poco a poco empece a disfrutar de las mil variedades de tes verdes, rojos, blancos… que el mercado me ofrecía, de Hornimans, Pompadur y especialmente Twinings, a cuyo te verde con limón creo que he terminado siendo adicta.

Pero la vida nos pone en el camino y de repente me encontré por causas del destino embebida en una presentación de Milford. Cuando acudi  al primer #momilford, aseguro que no tenia mucha idea de que se trataba, me encontré que Milford volvía a estar presente en mi vida tras años de ausencia. Nos explicaron que un #momilford (Momento Milford), es un momento relajado entre amigas, donde en vez de tomar un café o un refresco se puede disfrutar de una infusión fría, preparada con esmero. El sabor de estas combinaciones no dejo a nadie indiferente.

Descubri que el te no solo se puede tomar caliente (antes cuando una infusión se me quedaba fría la tiraba), que existen infinidad de nuevos sabores que bien combinados, con o sin alcohol, con frutas y hielo picado y algunos con azúcar como si fuera un San Francisco, pueden servirnos como una nueva opción a la hora de tomar algo diferente.

Tes realizados con mezclas de frutas melón con aloe vera ,  fresa con vainilla, manzana con pera y almendra, te rojo con mate y melocotón… El aroma que desprende cada caja nada mas abrirla te da la pauta de lo que mas tarde vas a saborear.

Unas semanas mas tarde era Andres Madrigal (chef de reconocido prestigio) quien nos daba una lección magistral para realizar cócteles especiales teniendo como base las infusiones, acompañados con sabores de la cocina oriental.

Me alegra  haberme reencontrado con la marca Milford porque han apostado por la nueva comunicación 2.0,  han sabido innovar, rejuvenecer la imagen, ofrecer un nuevo producto y aunque sigo siendo adicta al te verde, estas nuevas combinaciones de sabores ya forman parte de mi selección diaria.

  • Como bien dices Fátima, es un placer colaborar con Marcas como Milford, que apuestan por el diálogo y la experiencia con su público.
    Gracias por el post. Para influenzia y para mi en particular, ha sido todo un placer colaborar con Milford en esta agradable y sabrosa experiencia.

    Un abrazo

  • {"email":"Email address invalid","url":"Website address invalid","required":"Required field missing"}
    >